Entre Nanas a la Lucha;
Viviste con creces tu tiempo de gloria. Entre vítores y clamores de espada, de sangre ávida de libertad, de gritos lagrimeando un nuevo suelo que pisar,… Un pueblo nuevo que reclamó lo que del pueblo era. Todo por él… todo para él… y él… no siendo un Rey Sol más que abarcase lo ajeno por propio. Que imprimiese el sello de obligación y cobrase el impuesto rutinario por años de respiración, por segundos de libertad.
Siendo Pueblo… el propio pueblo.
Calma lucha, vuelve a dormir
Hoy no sueñan con nuevas espadas, con banderas pintadas de ideales,
Las creencias se abandonaron por prensa rosa, por amplios motores y rosas tuneadas.
Calma Lucha,
No desesperes.
Piensa el cansancio del qué dirán,
Del qué dijeron,
Del triste presente
O el escaso desarrollo.
Hoy sirves para recordar leyendas,
Porque la batalla de las ideas terminó,
Concluyó en un último episodio de violencia doméstica, de consumo a borbotones,
De tecnología del absurdo,
De rebaños de humanidad,
Que absortos en su culebrón te aludieron en alguna de sus películas
De aquellas
De vaqueros…
O de prestigio, épica, gloriosa… de esas otras…
De Fantasía…
Porque en eso te has convertido para ellos…
Para todos ellos…
Duerme… en tu leyenda.
El tiempo de las revoluciones pasó…
Solo eres mito,
Un vago sueño.
Y los sueños,
Sueños son.
By: Corina Morera Villar.